¿Está pensando en visitar el campo de concentración y exterminio de Auschwitz? En este artículo le proporcionaremos información histórica sobre los crematorios del campo.
Las atroces operaciones de exterminio de los nazis estaban diseñadas para optimizar el coste y el tiempo de las ejecuciones, y pronto surgió el problema de «deshacerse» del gran número de cadáveres.
A medida que continúes leyendo el artículo, conocerás la triste historia de los crematorios de Auschwitz, su función y otros datos relacionados, como su estado actual.
Pero antes de seguir adelante, permítame que le dé un valioso consejo: es muy recomendable reservar el acceso prioritario para evitar las largas colas de la entrada; también se recomienda ir acompañado de un guía experimentado, ya que es la única forma de sacar el máximo partido a esta experiencia cargada de emoción. Desde la famosa inscripción «Arbeit Macht Frei» hasta los barracones de los reclusos: cada centímetro dentro de Auschwitz es una oportunidad para crecer y reflexionar profundamente.
Entrada a Auschwitz-Birkenau (sin colas)
Comprar en línea. Elija la hora que prefiera. Visite por su cuenta los barracones de prisioneros, las tristemente célebres cámaras de gas y los crematorios.
Puede anular la reserva gratuitamente hasta el día anterior a la visita.
Índice
Breve historia de los crematorios de Auschwitz
Crematorio de Auschwitz: ID 10111826 | Auschwitz © Arsgera | Dreamstime.com
Las primeras ejecuciones perpetradas por los nazis contra la población judía se organizaron de forma diferente a las del periodo posterior del régimen.
De hecho, los soldados de las SS fusilaban a prisioneros individuales: pero esta proporción de uno a uno, de soldado a víctima, causaba bastantes dificultades a algunos soldados, que se mostraban reacios a matar a sangre fría.
Además, también había problemas logísticos y económicos: había que encontrar una solución eficaz para «deshacerse» de los cadáveres.
Al principio, los nazis utilizaron fosas comunes cavadas por los propios prisioneros, pero esto implicaba tiempo y esfuerzo, además de espacio.
Además, las numerosas municiones utilizadas suponían a la larga un coste para las arcas del régimen. Por estas razones, se pensó en equipar los campos de concentración y exterminio con cámaras de gas y crematorios, a fin de eliminar a los prisioneros con mayor eficacia.
Las ventajas eran muchas: en términos de tiempo , la operación era mucho más rápida. También en términos de logística, los crematorios permitían deshacerse fácilmente de los cadáveres, permitiendo incluso utilizar las cenizas en los campos.
Edificio del crematorio de Auschwitz: ID 170474675 | Auschwitz © Jean Marc Pierard | Dreamstime.com
Además, también había que considerar el aspecto psicológico: el uso de cámaras de gas y hornos daba a quienes cometían tales atrocidades un menor sentido de responsabilidad directa.
Además, al ocultar los cadáveres de esta forma, el régimen pensaba ocultar cualquier rastro del genocidio, evitando así el posible juicio de otras naciones una vez terminada la guerra.
Inicialmente, se crearon cámaras de gas provisionales en edificios fuera de Auschwitz I, pero cuando el campo se amplió para incluir el complejo de Birkenau, empezaron a pensar en una especie de «cadena de montaje» para completar el genocidio.
Fue entonces cuando se construyeron varios crematorios para quemar los cadáveres, conectados directamente a las cámaras de gas para acelerar las operaciones.
Sin embargo, poco antes de la llegada de los soviéticos, los nazis intentaron destruir todas las pruebas del exterminio, dañando también parcial o totalmente los crematorios.
Ruinas del crematorio II de Auschwitz, con el techo derrumbado de la sala de desvestirse en primer plano y la zona del horno y la chimenea al fondo: ID 68726059 | Auschwitz © Michael Paschos | Dreamstime.com
También por este motivo es muy recomendable ir acompañado de un guía experimentado , ya que sólo así será posible comprender exactamente dónde se encontraban los hornos y cómo se utilizaban
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Auschwitz-Birkenau: cómo funcionaban los crematorios
Los deportados llegaban al campo hacinados en vagones tras largos viajes en condiciones prohibitivas, que a menudo les causaban la muerte.
Los que sobrevivían al viaje eran seleccionados por las SS, que decidían de forma arbitraria e incuestionable quién era apto para el trabajo y quién no.
Estos últimos eran enviados directamente a las cámaras de gas y después a los crematorios.
Crematorio de Auschwitz: ID 90458246 | Auschwitz © Adwo | Dreamstime.com
La tarea más dura relacionada con estas prácticas era llevada a cabo por el Sonderkommando.
Se trataba de equipos especiales de reclusos, casi siempre judíos, que tenían que vaciar las habitaciones de cadáveres.
Equipados con máscaras antigás, utilizaban largos ganchos metálicos y procedían a extraer los dientes de oro.
Se les prometía que se les perdonaría la vida, pero en realidad eran asesinados periódicamente y luego sustituidos por otros prisioneros.
Como ya se ha mencionado, las instalaciones estaban diseñadas como una especie de «cadena de montaje» para exterminar al mayor número posible de personas: los hornos estaban equipados con elevadores para llevar los cadáveres a las salas donde podían ser quemados.
Cada horno podía quemar más de mil cadáveres en un día.
Chimeneas de los edificios en los que se quemaron los cuerpos de los judíos que murieron en los campos de concentración de Auschwitz y Birkenau (Polonia): ID 142701607 | Auschwitz © Thiago Lopes | Dreamstime.com
Preguntas más frecuentes
Primero hubo dos instalaciones llamadas Bunker I y Bunker II, cámaras de gas sin crematorios pero con una fosa adyacente: ambas fueron desmanteladas en 1942, sustituidas por instalaciones más eficientes. A partir de 1943 se pusieron en funcionamiento cuatro complejos equipados con crematorios y hornos.
Cada horno podía quemar más de 1.000 cadáveres al día, si se tiene en cuenta que cada instalación estaba equipada con cinco hornos y tres estufas, esto significa que cada instalación podía eliminar más de 5.000 cadáveres al día.
En cuanto al campo de Auschwitz I, son visibles dos de los tres crematorios, reconstruidos con elementos metálicos originales alemanes. De los cuatro crematorios de Birkenau, sin embargo, sólo quedan restos: tres de ellos fueron detonados por los alemanes para borrar las pruebas del exterminio, mientras que el cuarto fue parcialmente destruido por los prisioneros durante un levantamiento en 1944. Sin embargo, aún pueden verse cinco agujeros donde se encontraban algunos de los hornos.
Para que el exterminio fuera lo más eficaz y económico posible, los alemanes crearon complejos bien organizados en Auschwitz II-Birkenau. Utilizando un sistema de grúas y a veces de vías, los cadáveres eran transportados directamente desde las cámaras de gas a las instalaciones con los crematorios. Esto sólo tenía lugar después de que los Sonderkommandos hubieran recuperado todo lo útil de los cuerpos de las víctimas.
Conclusiones
Aquí llegamos al final de nuestro artículo. Hemos visto juntos cuántos hornos tenía el campo de Auschwitz-Birkenau y cómo funcionaban.
Les he hablado del papel de los Sonderkommandos y del estado actual de los crematorios. Por último, he respondido a las preguntas más frecuentes; no obstante, no dudes en formular otras utilizando la sección de comentarios que encontrarás más abajo.
Si desea obtener más información sobre este tema, le recomiendo que eche un vistazo a nuestros otros artículos de la página, pero sobre todo permítame recordarle la importancia de recurrir a un guía experto durante su visita.
Sólo con el acompañamiento de un verdadero experto podrá sacar el máximo provecho de esta visita obligada, una verdadera oportunidad de crecimiento y reflexión, y es importante no dejar nada fuera porque, como dijo Anneliese Knoop-Graf: «El olvido es la desgracia, mientras que la memoria es la redención».
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